• 23 de agosto de 2025 07:11

“Cada vez que aceptamos cookies de una web, entregamos fragmentos de nuestra vida” advierte Álvarez-Pallete

Porradioplayjujuy

Ago 21, 2025

José María Álvarez-Pallete, expresidente de Telefónica y actual autor del libro La economía de los datos, revela en una sola frase un aspecto inquietante de la era digital que trastoca la privacidad de nuestros datos personales:

“Cada vez que aceptamos las cookies de una web, entregamos fragmentos de nuestra vida y, a cambio, recibimos un servicio que nos es útil y que nos dicen que es gratis”.

Esta afirmación muestra una realidad poco visible: la navegación online no es tan ‘gratuita’ como parece. Al hacer clic en ‘aceptar cookies’, los usuarios no sólo permiten el funcionamiento básico de una web, sino que también ceden valiosa información personal que, para las empresas, se convierte en una acción clave para monetizar sus plataformas.

La recopilación y análisis de nuestros datos favorece a grandes empresas

¿Qué cedemos al aceptar cookies?

El simple gesto de hacer clic en “Aceptar cookies” es, en realidad, una puerta abierta a nuestra información. Según el Instituto Nacional de Ciberseguridad (INCIBE), las cookies permiten recopilar datos como:

  • Sitios web visitados
  • Tiempo de permanencia en una página
  • Preferencias de compra
  • Ubicación geográfica
  • Tipo de dispositivo
  • Comportamientos de navegación

Mientras algunas cookies son funcionales y permiten recordar contraseñas o idioma, otras —como las de terceros y analíticas— tienen fines comerciales y de perfilado publicitario, en estas últimas es donde comienza el pago invisible por nuestros clics.

Un “mercado ausente” donde el usuario queda fuera

Álvarez-Pallete califica este entorno digital como un “mercado ausente” en el que existe una alta demanda de datos por parte de empresas pero en el que el usuario, verdadero productor de esos datos, no tiene ningún control ni participación.

Los datos recopilados y analizados construyen un perfil de cada individuo. Este perfil es de un valor incalculable para la publicidad personalizada, la segmentación de audiencias y el desarrollo de nuevos productos y servicios adaptados a nuestros intereses.

Las legislaciones vigentes y los cambios a futuro

¿Sabemos qué cedemos? La mayoría de los usuarios no entiende qué implican realmente las políticas de cookies y confía en los sitios web por los que navega. Pese a las normativas como el Reglamento General de Protección de Datos (RGPD) y la Ley Orgánica de Protección de Datos y Garantía de los Derechos Digitales (LOPDGDD) que obligan a las webs a explicar de manera clara y detallada el uso de la información, estas exigencias no se cumplen.

A futuro, la directiva e-Privacy busca reforzar los derechos del usuario permitiendo la navegación sin cookies, excepto en casos estrictamente necesarios.

Soluciones: Derechos digitales, intermediarios y transparencia

Para revertir este entorno injusto, Álvarez-Pallete propone medidas clave:

  • Derechos digitales individuales sobre los datos que generamos.
  • Intermediarios de confianza que nos representen ante plataformas y empresas.
  • Transparencia absoluta sobre el valor y el destino de nuestros datos.

El objetivo: Convertirnos en actores activos y conscientes del mercado digital.

José María Álvarez-Pallete, expresidente de Telefónica y actual autor del libro La economía de los datos, revela en una sola frase un aspecto inquietante de la era digital que trastoca la privacidad de nuestros datos personales:“Cada vez que aceptamos las cookies de una web, entregamos fragmentos de nuestra vida y, a cambio, recibimos un servicio que nos es útil y que nos dicen que es gratis”.Esta afirmación muestra una realidad poco visible: la navegación online no es tan ‘gratuita’ como parece. Al hacer clic en ‘aceptar cookies’, los usuarios no sólo permiten el funcionamiento básico de una web, sino que también ceden valiosa información personal que, para las empresas, se convierte en una acción clave para monetizar sus plataformas.¿Qué cedemos al aceptar cookies?El simple gesto de hacer clic en “Aceptar cookies” es, en realidad, una puerta abierta a nuestra información. Según el Instituto Nacional de Ciberseguridad (INCIBE), las cookies permiten recopilar datos como:Sitios web visitadosTiempo de permanencia en una páginaPreferencias de compraUbicación geográficaTipo de dispositivoComportamientos de navegaciónMientras algunas cookies son funcionales y permiten recordar contraseñas o idioma, otras —como las de terceros y analíticas— tienen fines comerciales y de perfilado publicitario, en estas últimas es donde comienza el pago invisible por nuestros clics.Un “mercado ausente” donde el usuario queda fueraÁlvarez-Pallete califica este entorno digital como un “mercado ausente” en el que existe una alta demanda de datos por parte de empresas pero en el que el usuario, verdadero productor de esos datos, no tiene ningún control ni participación.Los datos recopilados y analizados construyen un perfil de cada individuo. Este perfil es de un valor incalculable para la publicidad personalizada, la segmentación de audiencias y el desarrollo de nuevos productos y servicios adaptados a nuestros intereses.Las legislaciones vigentes y los cambios a futuro¿Sabemos qué cedemos? La mayoría de los usuarios no entiende qué implican realmente las políticas de cookies y confía en los sitios web por los que navega. Pese a las normativas como el Reglamento General de Protección de Datos (RGPD) y la Ley Orgánica de Protección de Datos y Garantía de los Derechos Digitales (LOPDGDD) que obligan a las webs a explicar de manera clara y detallada el uso de la información, estas exigencias no se cumplen.A futuro, la directiva e-Privacy busca reforzar los derechos del usuario permitiendo la navegación sin cookies, excepto en casos estrictamente necesarios.Soluciones: Derechos digitales, intermediarios y transparenciaPara revertir este entorno injusto, Álvarez-Pallete propone medidas clave:Derechos digitales individuales sobre los datos que generamos.Intermediarios de confianza que nos representen ante plataformas y empresas.Transparencia absoluta sobre el valor y el destino de nuestros datos.El objetivo: Convertirnos en actores activos y conscientes del mercado digital.